LA LEY DE CROHN.

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Lugar: LLaviana, Asturies, Spain

viernes, abril 03, 2009

SOBRE HORIZONTES Y FRONTERAS


Pasarán los años y Andrés se enamorará, posiblemente llorará muchas veces, reirá muchas mas, Andrés, en resumen ,VIVIRÁ....¿cuanto tiempo? no sé, como no lo sé yo ni nadie, porque nadie tiene ese privilegio o esa desgracia pero el, gracias a unos padres valientes y a un hermano deseado por todos los motivos que se desea un hijo y mas aún, lo hara libre del yugo infame y terrible de una enfermedad que hasta hoy le incapacitó para ser lo que es, un niño, y poder disfrutar como lo que es y de lo que no pudo ejercer hasta que la ciencia y sus emisarios de ilusión le dieron la oportunidad de comenzar de cero después de llevar 7 años de hospital, medicos, trasfusiones y dolor, mucho dolor.
A los cuatro meses le diagnosticaron una betatalasemia mayor que impedia la creación de globulos rojos, casualidades de la vida un doctor que tenia la misma enfermedad en menor grado dio en el clavo, y asi comenzó la carrera contra reloj por sobrevivir.
La solución pasaba por un transplante de médula... pero, para que el pequeño y débil cuerpo de Andrés evitara el rechazo, el donante debía tener unas condiciones muy concretas... tanto que los médicos buscaron entre 11 millones de donantes sin ningún exito....su contador de vida aceleraba pero habia una esperanza y ante esa posibilidad nadie ni sus padres ni su equipo médico lo dudo. Con el tiempo apuntando como un francotirador implacable había que engendrar un bebé libre de la enfermedad, hereditaria, y con un perfil genético compatible con el de su hermano enfermo, tras un largo proceso y gracias a la Ley de Reproducción asistida que se aprobó en 2006 se comenzó todo y así tres meses después del nacimiento de Javier, el 23 de febrero la transfusión de las celulas del cordón umbilical de Javier batallaron con las de Andrés y como era de esperar vencieron, Andrés viviria, naceria por segunda vez....y lo haria sin trasfusiones, sin el cateter, sin la agresiva quimioterapia.
Soledad y Andrés deseaban otro hijo y con el vino pareja la vida, ellos siempre tendrán una unión que irá mas allá, siempre serán uno parte de otro indisoluble, juntos sin apenas consciencia del como aunque si del porque lucharon por el mismo fín.
La Ley de Reproducción Asistida se aprobó en 2006, tras ser tumbada en el Senado debido a la oposición del PP y con el ruido de sables de la Conferencia Episcopal, de no ser por esta ley Andrés habria fallecido, una vida menos, sus padres deseaban otro hijo que además salvaria al que ya tenian, Javier fué seleccionado genéticamente y nació, una vida mas. Este hecho es uno de los avances prácticos de la ley, que en el caso de enfermedad con origen incurable, posibilita seleccionar entre los óvulos fecundados en procesos de reproducción asistida el embrión que no tiene el gen portador de esa enfermedad, y nazca asi un niño sano de esa enfermedad.
Cuando nació Javier la Conferencia Episcopal calificó esta técnica de "horrenda" y "eugenesica" y a pesar de estas declaraciones Soledad y Andrés quieren bautizar a su bebe..."si la iglesia no nos deja, lo bautizo yo en el chorro" dice la madre, son creyentes, son católicos pero no integristas, son personas normales, son padres, son una pareja que luchó contra la guillotina de la muerte y consiguieron mellar su cuchilla antes de que llegase al cuello de su hijo, y lo hicieron con la ciencia a su lado, con la investigación y con el desarrollo, no con ningún experimento hitleriano en busca de la raza aria, con estas técnicas no se buscan hijos con los ojos azules y rasgados o con los labios de Jud Law, no buscan algo banal,éstico, y frivolo sino la busqueda humana de la vida sin enfermedad y sin dolor, porque no condenan los Obispos la lucha contra el cancer? para que investigar..., que diferente resulta escuchar a curas de la vida real, los que estan con la gente conscientes de la realidad y posados de la nave del dogma retrógrado...pero eso es harina de otro costal.
La aspita abierta por técnicas como esta u otras que aun se están investigando nos hacen mirar al cielo y sentir que la lluvia cae sobre la cara sin escondernos debajo del paraguas de tratamientos y medicaciones que machacan no solo físicamente sino anímicamente a millones de personas, y confiar....confiar en presente y en futuro, por eso cuando miro las fotos de esta familia risueña, feliz y unida no puedo por menos que creer que al fín hoy para la humanidad por suerte no hay fronteras....hay horizontes.